domingo, 4 de octubre de 2015

Second round!

Hola Opocompis,
perdón por la demora pero llevo unos días de locos. Después de volver de unas merecidas vacaciones, me tocó terminar la primera vuelta... 183 temas,(que se dice pronto!)
Y de repente, me encuentro en la segunda vuelta, 11 temas a la semana y no llego!
Tengo los nervios a flor de piel porque, en teoría, son temas que en su día canté, ¡y no los recuerdo!
No tengo un orden, ni una estructura... vamos que voy super pérdida.

y vosotros, ¿cómo lo hacéis?  ¿tenéis un orden para los temas?, ¿cuántas horas dedicáis a cada uno?
La verdad que por un lado estoy ilusionada por haber terminado todos los libritos rojos del primer oral pero por otro estoy asustada, porque no sé gestionar tantos temas,
Me siento un poco perdida, aunque imagino que es cuestión de habituarse.
Veremos a ver cómo se desarrolla todo, la esperanza es lo último que se pierde, dicen.

Un saludo compis y ¡ánimo con esos temas!


domingo, 2 de agosto de 2015

¡Huele a vacaciones!

¡¡Señoras y señores, las aquí presentes tendrán vacaciones!!

Sí, sí, lo sé… ¡somos unas afortunadas!

En pocos días tendremos un par de semanas de vacaciones… me veo en la playa, tostada al sol, perdiéndome por las calles, tomando algo con los amigos y haciendo alguna que otra escapada. 

Todo ello sin pensar en Carperi, las modificaciones, derecho penal, civil y todo lo que conlleva.
Parece una tontería, pero todo esto nos da fuerzas para afrontar las semanas que nos quedan con entusiasmo, porque después de tantas reformas (que deprimen a cualquiera) y las que nos quedan, pues al parecer el Gobierno ha decidido fastidiarnos la existencia, solo tenemos ganas de llorar, lamentarnos y darnos cabezazos contra la pared.

En mi caso, esta semana he empezado la segunda vuelta. Si pensaba que la primera era dura, es porque no tenía ni idea de cómo sería la segunda. Algunas compañeras ya me lo advirtieron, pero hasta que no te ves en el meollo del asunto no te lo crees. Cada día que pasa me parece más imposible llegar a memorizar todos los temas y poder cantarlos como quien te explica que día hace hoy. Lo único que me anima es pensar: si otros pudieron… ¡porque no iba a hacerlo yo!

A todo ello, hay que sumarle las altas temperaturas. De verdad, así no hay quien estudie. Para colmo, todos mis amigos están de vacaciones, de viaje o disfrutando las tardes al sol (los envidio tanto…) y la peor parte viene cuando te preguntan si te apuntas a sus planes. Duele tanto decir que no…

Sé que todos vosotros estáis como yo, amargados, asfixiados y agobiados. Mi método es imaginarme lo feliz que seré cuando esté en la escuela judicial pensando que los años de oposición han valido la pena y que he logrado alcanzar mis metas. Imaginaos por un momento en los juzgados, haciendo lo que más os gusta y pudiendo decir: soy Juez/Fiscal.

Dicho esto, solo me queda desearos todo el ánimo del mundo a los que no tenéis vacaciones y a los que os estáis preparando para el tercer examen. Al resto, animaros para no abandonar entre tanta reforma y recordaros que con constancia, optimismo y alguna que otra escapada para desconectar, todo se puede.


¡Ánimo!

domingo, 12 de julio de 2015

nuestro color blanco

Apreciados compañeros de viaje. 
¡El blanco está de moda! ponerse moreno, hoy en día, no tiene mucho misterio, son horas y horas de  incesante sol hasta notar que la piel se cae a tiras. 

Nada que envidiar, hay que reivindicar nuestro blanco nuclear.
¡Eso sí es una verdadera hazaña! un logro absoluto que no se consigue en un par de meses. Son horas sin ver el sol, encerrados en un opozulo, viendo brillar el sol desde la ventana.
Es un color único, una tez que identifica los de esa misma especie, ese ser que haga calor o frío no dejar de aprender, de evolucionar, de superarse a sí mismo. 
Hay que lucirlo con orgullo, es el reflejo de todas esas horas de dedicación. Es posible que nadie más lo entienda, pero es tu color, digno reflejo de esas cuatro paredes que día tras día te acompañan en esas largas horas de estudio. 
El verano siempre ha sido una estación complicada para nosotros. Si ya de por sí a la gente le cuesta entender por qué no puedes tener la vida social de antes, si añadimos la época de vacaciones (del resto de planea, por supuesto, nosotros hemos olvidado el olor del verano.) eso se hace insoportable. 

Desde nuestro humilde opozulo queremos mandar un mensaje a todos esos amigos faltos de empatía: Las oposiciones son trabajo NO REMUNERADO, cuanto antes lo comprendáis, más felices todos. 
Y, desde aquí quiero deciros opocompis, que el verano sofocante y sin olor a mar no es solo tuyo, es de todos esos opositores que, a pesar de este calor, seguimos al pie del cañón. Así que desde aquí, os mando todo mi apoyo y ánimo,
Que nadie os distraiga de vuestra meta con chantajes emocionales, es vuestra meta, vuestro objetivo, vuestra vida y si, algún día os desviáis que sea decisión vuestra y no la de los demás. 
Y,  ¡a lucir ese bonito blanco! es nuestra marca de identidad 


sábado, 13 de junio de 2015

ahora que se acerca el verano.

Se acerca el verano y, aunque de por sí el opositor medio es un ser con escasa vida social, ello no obsta para que absolutamente todos tus contactos te revienten el whatsapp (o símiles) explicando los innumerables planes de verano, en donde el mar, el sol y las mil aventuras serán el centro de toda vivencia. 
Esto, para ser sinceros, me entristece bastante... ¿cuántas aventuras van a vivir sin mí? eso me lleva al irremediable pensamiento de ¿cuánto falta para llegar? espera... mejor dicho ¿llegaré?
Sin embargo, justamente esta semana pude hacer un cante perfecto de penal y de repente, ese pozo oscuro se podía traducir en una única frase de 3 palabras: "VALE LA PENA" 

¿No sentís esa alegría inconfundible de salir del preparador FELIZ después de un buen cante? ¿No sentís esa emoción y alegría indescriptible cuando el esfuerzo se ve reflejado? 
Es entonces cuando pensé que, puede que este año y los venideros me pierda muchas cosas, sin embargo, tengo la firme convicción de que lo mejor está por venir. 

Las aventuras y emociones llegarán, cada día estamos un poquito más cerca. 
Qué no os engañe la ilusión de "una noche de verano" nuestro futuro está más cerca de lo que pensamos.

Suerte a todos los que estén con el primer oral y felicidades a los que lo han pasado ya! 
 y muchísima suerte a todos los que se presentan el día 20 al test de secretarios :)


jueves, 28 de mayo de 2015

Un objetivo

Hola compañeros de viaje, 
el otro día  escuchando una entrevista a Mario Conde, hubo una frase que me llamó la atención "Para todo lo que tienes que hacer en tu vida ha de haber un motivo".
Esa frase me dio que pensar. ¿Para qué estaba estudiando tanto? ¿Por qué estaba sacrificando parte de mi vida, de mis amigos, de mi familia...? 

La respuesta era sencilla, por un objetivo, por una meta, por un sueño. 

A partir de aquí, me gustaría plantearos un pequeño ejercicio:
Cómo os imagináis vuestra vida de aquí a 10 años. Dedicaros unos minutos a recrear la persona que esperáis ser en ese futuro. ¿Listo? ahora pensad si lo que estáis haciendo hoy os acerca a esa persona que habéis imaginado ¿Es suficiente?


  •  si la respuesta es positiva, seguid así y no os rindáis, recordad siempre vuestro objetivo y continuad luchando por vuestro destino. 
  •  si la respuesta es un sí parcial, buscad los errores y probad de buscar otros caminos donde poder dar esos pasos que te acerquen a aquello que deseas ser. 
  • si la respuesta es negativa tienes que plantearte que, o bien no has planteado correctamente el objetivo o bien, el camino a seguir es el equivocado. 


Y recordad que la persona que seréis dentro de 10 años no será solo una "profesión" y con lo cual, hay que dar pasos en todos los aspectos para llegar a ese "yo futuro" de la forma más completa posible. 

Y bien, ¿quién esperas ser?


sábado, 9 de mayo de 2015

¡La primavera la sangre altera!

Son las 19.30 horas de la tarde y cada vez que me pongo delante de los apuntes me pregunto lo mismo, ¿cómo voy a estudiar con este calor? 

De verdad, esto es misión imposible. Leer un párrafo es un suplicio, cada vez que cojo el bolígrafo me pongo enferma, y todo eso sin tener en cuenta las reformas del Código Penal. ¿Por qué nos pasa esto a nosotros? Y me quejo teniendo presente que a mí la reforma no me afecta tanto porque aún no he terminado la primera vuelta, pero no puedo evitar pensar en los que llevan opositando años y años, y de repente se topan con esto. Sé que es un martirio, pero no desistáis, podéis con ello y no tiréis la toalla. Pensad en lo que viene después de esto, en lo recompensado que está. 

Sé que el día no acompaña, es más yo preferiría que estuviera tronando y que fuera la típica tarde de palomitas, película y manta… pero, obviamente, no tengo tanta suerte (me rio por no llorar). Es más voy a confesar algo… imaginaos  como estoy de distraída que he ido a mirar que daban en la televisión, más que nada para cotillear un poco, y he visto que estaban emitiendo una película Disney, Cenicienta en versión moderna, pero no la típica de dibujos, sino con personajes de carne y hueso. El hecho en sí es irrelevante, lo importante es que me he quedado a verla… ¡me he quedado a verla! Y cuando ha terminado me he sentido tremendamente satisfecha con la “versión moderna de Cenicienta”, incluso me he puesto a estudiar y me sentía más feliz. Estoy fatal, después de esto ha quedado más que probado. Evidentemente, mi felicidad se ha hecho trizas cuando he vuelto a mirar por la ventana y me han entrado unas ganas locas de salir a la calle, tomarme una cervecita en una terraza y disfrutar del gran día que hace. ¡Esto no es justo, todo se está confabulando en mi contra! Con éste tiempo, es inevitable no pensar en las vacaciones de verano… y que ganas tengo de que lleguen… 

Lo sé, esto es deprimente, pero tengo una buena noticia, en realidad la mejor de las noticias. Atención, porque esta noche es: ¡Sábado noche! (¡soy taaaaan feliz!) Os mentiría si os negara, que he parado el cronómetro más de una vez para meditar sobre cuál es la mejor opción de esta noche. Ya sabéis, un plan de relax (bar, amigos, risas…) o directamente salir de fiesta (¡descontrooool!). Algo me dice que optaré por la primera, siempre y cuando no me líen… (en realidad, ojalá me líen hahahaha).

Bueno chicos, si releo éste post no sé cuál es el motivo ni lo que quiero decir, más allá de que no sois los únicos que estáis encerrados en casa o en la biblioteca, intentado memorizar un artículo imposible de penal o releyendo, una y otra vez, un párrafo insufrible de civil. Os aconsejo que penséis en positivo, y que lo deis todo para poder salir cuanto antes y empezar a disfrutar de vuestro breve, pero merecido, fin de semana.

A mí todavía me quedan unas horitas… ¡deseadme suerte!

miércoles, 8 de abril de 2015

Mi modelo a seguir

A cuatro días de mi primer examen oficial (al cual voy con la idea de que es un ejercicio más en mi aprendizaje, más que una convocatoria oficial.), con una reforma del Código Penal recién salida del horno (y en el momento más inoportuno para un opositor, si se puede decir.) y, además, con una fiebre que ni la Gripe Española, la cabeza va a mil revoluciones y acaba estando en todos lados menos donde debería estar; en los temas.

Pero, si la fiebre me lo permite, me gustaría dedicar unos minutos a vosotros, aquellos opositores que lleváis tiempo en este mundo, que haga frío, calor, os encontréis bien o mal seguís día a día al pie del cañón. Hoy quiero dar mi más absoluto reconocimiento a todos aquellos compañeros de oposición que llevan años dejándose la piel, que saben disfrutar de la gloria de un buen cante y sobreponerse a la tristeza que puede implicar un mal cante.
A vosotros, por ser fuente de inspiración a través de la red, con vuestros blogs, con vuestras historias, por darme aliento y fuerzas para, simplemente, continuar.

A vosotros, cuyos nombres desconozco, cuyas caras a veces he imaginado, por ser el vivo retrato de una lucha incesante, por demostrarme que no hay excusas, solo hechos.
Tampoco quiero olvidar a todas aquellas personas que, a pesar de la dureza de la oposición, tienen que compaginarlo con un trabajo (dicen que soñar es gratis, pero en algunos casos requiere una inversión inicial consistente) o aquellas personas que por X causas tienen algún problema crónico de salud y, pese a ello, siguen al pie del cañón compaginando cantes con médicos, dolores con apuntes y superando cualquier adversidad.

Gracias a todos esos ejemplos anónimos por ser una fuente de inspiración, por demostrar que se puede siempre que se quiera.
Os deseo la mayor de las suertes para el próximo día 12 de abril. Yo estaré allí, aprendiendo de mis compañeros más veteranos y mandando toda la energía positiva del mundo a todos ellos por ser una lección de vida en toda regla y porque, sinceramente, espero seguir teniendo ese espíritu luchador dentro de 3-4-5 años o los que necesite para alcanzar esa meta tan deseada por todos.

¡Mucha suerte a todos, compañeros!


p.d. Recordad que una vez finalizado el examen, se acabó el agobio, aprovechad el día para un merecido descanso y poder disfrutar del sol, os lo merecéis!

domingo, 22 de marzo de 2015

¡Vacaciones!

¡Hola! Hoy es mi turno y he decidido recordaros que en unos días llega Semana Santa, justo antes del primer examen, hecho que carece de importancia para los que tenemos cero posibilidades de aprobar. En el último mes, me he dedicado a tachar los días hasta las esperadas vacaciones. 
Mi pregunta es: ¿tenéis planes? Porque yo no, y quiero llorar. Al llegar las fiestas, es cuando te das cuenta de lo extremadamente pobre que eres siendo opositor (me rio por no llorar).

Justamente ayer, unas amigas me propusieron hacer una pequeña escapada. 
Al momento, quise gritar: ¡Vamonoooooos! Pero me contuve, más que nada porque tenía que sacar mi super calculadora y ponerme a hacer cuentas. Tras darle vueltas, restar por un lado, sumarle a otro y un sinfín de posibilidades, me di cuenta de que era imposible salvarlo. Los opositores no podemos tenerlo todo…  
Mi parte racional me decía: Si quieres vacaciones de verano, más te vale ahorrar o te veo en agosto, encerrada en tu casa, blanca como la nieve y llorando como una magdalena.
¿Qué he hecho yo para merecer esto? (de nuevo, me rio por no llorar)

Cierto es, que me entró una presión en el pecho muy deprimente. (Me entraron ganas hasta de escuchar música triste… pero me contuve). Pensé en lo bien que se lo pasarían ellas y en cuanto las odiaba (en realidad las adoro eh). Conclusión, que me dije que tenía que cambiar el chip. El hecho de no hacer una pequeña escapada, no tiene por qué afectar a mis esplendidas y tan deseadas vacaciones. Hay muchas formas de disfrutar, tan solo hay que saber hacerlo. De entrada, los días de relax, paseos, cafés y risas en el bar de la esquina, pueden ser tan buenos como un desayuno a pie de playa, pues lo que verdaderamente importa es la compañía.  

El hecho de no poder cargar el coche e irte a otro lugar, no tiene que ser sinónimo de depresión. Mi consejo es que disfrutéis, os lo paséis genial del modo en que podáis y que os olvidéis de esos temas que os traen de cabeza (sin ir más lejos, la servidumbre o el registro).

A los que os vais de viaje, desconectad al máximo y volved.

Pd: ¡Nada de escaquearse! Que en unas semanas, tenemos examen.


¡Besos!

viernes, 30 de enero de 2015

Tenemos derecho...

Apreciados compañeros de viaje:
Bien sabéis que el mundo "opositoril" es como una gran montaña rusa, a veces sentimos rozar el cielo cuando salimos de un buen cante y otras, en cambio, parece que la respuesta está en el fondo de la cama, (y digo en el fondo de la cama porque buscar la solución a nuestros problemas a tequilazo limpio, podía parecer muy divertido en la fase universitaria pero impensable cuando eres opositor).

La pregunta es, ¿cómo superar esos días negros?
Una buena amiga, además de gran opositora me dio unos consejos y, tal vez, os puedan ayudar a vosotros
  1.  levántate siempre mirándote al espejo y diciendo "soy estupendo/a soy el/la mejor"
  2.  No olvides el deporte, ya sabes el dicho mens sana in corpore sano
  3.  Recuerda que las oposiciones son parte de tu vida, no la totalidad de ella. 
  4. Sonríe, es el mejor de todos los remedios. 
Y añado:

a) no olvides a la gente que te quiere, ellos también sacrifican parte de su vida esperándote verte triunfar.
b) No te engañes, seguramente habrás impuesto unos horarios que ni los de la mili en su peor época y, pese a ello, todavía no te han echado de casa. recuérdalo, TE QUIEREN.
c) quiérete mucho, te quedan muchos años en los que aguantarte a ti mismo y si tanta gente apuesta por ti es porque debes ser alguien excepcional.
d) Sueña, nunca dejes hacerlo, es una parte fundamental de la "carrera de fondo", soñar en nuestra meta, en nuestro objetivo; ser un soñador es uno de los superpoderes del opositor, ¡úsalo!


y por último, recuerda que tienes absoluto derecho a estar mal, despotricar, quejarte, llorar, gritar, decir "a la mierda" y no querer salir de la cama. Es totalmente legítimo pero recuerda, cada minuto llorando es un minuto menos para ser feliz. Un día malo está permitido, siempre que luego te levantes con la idea de que el mundo está hecho justo para ti. 

Ánimo y, como dicen los italianos, "piano, piano si va lontano"
¡Hasta la próxima guerreros!


sábado, 17 de enero de 2015

¡Sábado noche!

¡Hola a todos!

Hoy es mi turno (sí, sí, lo sé… ya era hora). Entre tantas lamentaciones, obviamente necesarias si reparamos en las horas que nos pasamos encerrados en casa, voy a hablar sobre algo que mucho opositor olvida: el recreo. Dentro de éste incluyo: ir a hacer un café con ése amigo que no ves nunca y que te detesta por ello; ir de compras con esa amiga que tiene la mano rota; salir a tomar unas cañas o directamente mover las caderas en algún antro; hacer deporte e incluso ir a pasear al perro (dejad de decirle a vuestro padre/madre/hermano que vaya por vosotros). Muchos opositores, encerrados en sus opozulos, olvidan que entre tanto cante y cronómetro, hay vida más allá (a mi parecer un elemento clave para triunfar o sencillamente no acabar mal del “coco”). Chicos, es sano vivir. 

No es la primera vez que escucho decir a algún opositor/a (y no digo nombres) que cuando sale a la calle, se siente mal porque está perdiendo tiempo de estudio, etc... Estoy plenamente de acuerdo con que no te puedes pasar todo el día tomando una caña o viendo pasar las horas, pero es inadmisible llegar al extremo de no salir. La mayoría de opositores, que tengo el placer de conocer, son recién licenciados, por lo general jóvenes que están viendo pasar sus mejores días, semanas, años por la cara y que ni se inmutan. Me incluyo, pero solo en lo de joven, porque revindico que aunque Carperi nos envíe, cada día, más actualizaciones y que las semanas parezcan no tener fin, hay vida más allá y que ir a tomar una cerveza, reírte de las cosas más superfluas, bromear, bailar, brindar y soñar es gratis (bueno lo de la cerveza quizá no tanto… pero es un gasto útil) y muy necesario para poder mirar al futuro con optimismo y entusiasmo. Yo me he propuesto no desfallecer a lo largo de este arduo camino, porque creo que la meta merece muchísimo la pena, pero sobre todo porque no me quiero dejar derrotar por falta de vida. Somos jóvenes y aunque parezca que todo está perdido, tan solo acabamos de empezar y quedarse en casa llorando por lo que todavía no ha ni sucedido (ejemplo: ¡No aprobaré! ¡Cómo voy a cantar delante de un tribunal! ¡Mi cante será horrible!) no merece la pena, por no decir que además es muy contraproducente. Con todo esto, no quiero decir que no sea bueno lloriquear, todo lo contrario es genial para desahogarse, pero no debemos centrar nuestro día a día en eso.

En mi caso, no hace mucho que empecé a opositar, es más quizá no sea ni la más indicada para hablar, pero lo que sí tuve muy claro es que esto no podía cambiar el tipo de persona que soy, no podía obligarme a centrar toda mi atención en ello, es decir, estudio mis horas y el día que no me cunde, es un día nefasto, pero después de eso hay mucho más. No soy de las que se lamenta, soy de las que se pone unas deportivas y se va a correr, de las que llama a una amiga y le pone las orejas coloradas por tanto lloriquearle o directamente, de las que cierra el libro, pone la música alta y cierra los ojos con un “mañana, será otro día”.

Sin ir más lejos, hoy sábado he hecho eso. En Barcelona hace un sol radiante y, para colmo, debajo de mi ventana hay una pastelería. Total, que entre los olores y el solecito he terminado asqueada y con un hambre terrible. Así que he cerrado el libro, me he ido a correr y más tarde estudiaré. Todo ello sin olvidar, que esta noche no hay excusa que valga y que ir a tomar algo, no hace mal a nadie.


Opositores, la vida son dos días y hay que vivirla, no verla pasar.